Fuente de datos meteorológicos: El tiempo en San Luis Potosí a 30 días
sábado 20 de abril de 2024 San Luis Potosí, México
Fuente de datos meteorológicos: clima en San Luis Potosí a 30 días

La sociedad potosina leía con avidez y escándalo la nota roja de los periódicos locales de la primera década del siglo XX, eran abundantes las noticias sobre hechos delictivos cometidos al calor de las copas, pero también se publicaban sin ningún eco disertaciones sobre la necesidad de que la autoridad aplicara medidas más estrictas para regular el consumo de alcohol.

La mayoría de los delitos se cometían en cantinas y pulquerías cercanas a los mercados o de los barrios, mientras que no se encuentran noticias sobre hechos de sangre en cantinas del primer cuadro de la ciudad, lo cual no significaba que no se presentaran riñas y lesiones entre su escogida clientela.

Otros delitos comunes, sin que interviniera el alcohol, eran las riñas entre mujeres por el hombre amado y que estando presente no hacía nada por separarlas.

A continuación les presentamos una selección de notas policiacas que nos demuestran que poco ha cambiado la fisonomía delictiva de la ciudad.

Riña mortal en la Pulquería de El Peñasco
Frente al jardín de San Francisco había una pulquería llamada El Peñasco, ahí se dieron cita dos hombres del pueblo a consumir la bebida de los dioses. Ignacio Rocha, era un bolero y vendedor de periódicos, y Manuel Martínez, de oficio zapatero, de acuerdo a la relación de la noticia policiaca que dio fe de los hechos.

No se conocieron los detalles de los motivos o diferencias entre ambos, la cosa es que en un “dos por tres”, Ignacio le asestó una pedrada en la frente a Manuel, quien sin demora sacó un filoso cuchillo y le dio una profunda cortada en la yugular y otras más en el estómago con una saña inaudita que fue más que un simple escarmiento. El bolero pronto expiró. Llegó la policía, el zapatero fue llevado al hospital y el bolero a la plancha para la autopsia de rigor.

Escaramuza por celos

María Navarro era una mujer dulce y esposa fiel, de origen humilde, diligente y dedicada a las labores del hogar y al cuidado de los hijos y de su marido Anselmo N. Una mañana María recibió a una amiga que le fue con el chisme que su esposo andaba con otra mujer, su semblante se descompuso, le ganó la cólera y con los datos obtenidos salió de su casa en busca de venganza, al encontrarla in fraganti al lado de su hombre sacó las uñas y se lanzó en contra ella, le desgració la cara, la tiró al suelo y le dio varios golpes en la cabeza, sin que el marido hiciera algo para controlar la ira de María. La mujer herida fue atendida en el Hospital Civil “hecha una lástima por andar tomando la fruta del cercado ajeno”.

Hembra y macho
No es extraño ver como a diario están las pulquerías repletas no solo de hombres viciosos y desocupados, sino lo que es peor, de mujeres sucias y repugnantes. No es pues difícil que haya casos en los cuales se trabe una verdadera lucha entre ebrios de diferente sexo. Ayer, a la puerta de una pulquería situada en una de las calles de la Reforma, y rodeada por una multitud de gentes, completamente ebrias, reñían Homobono García y Romana Saavedra, habiendo salido ésta victoriosa y aquél con una herida cortante en la cara. Afortunadamente la policía llegó a tiempo y les echó el guante.

Víctimas del alcohol
Incontable es el número de víctimas que sucumben diariamente en aras del nefando y repugnante vicio llamado embriaguez. A la casa número 15 del Antiguo Juzgado (en el Barrio de Tlaxcala) llegó Anastasio Ramírez, como de costumbre, en estado lamentable de coma; se recostó y se quedó dormido y dormido para siempre.
Tal es el triste fin a que se están destinados estos pobres locos o desesperados.

En brazos de la desgracia
Son incontables las víctimas que por ceder a las insinuaciones de algunos amigos viciosos, porque ya llevan en sí el germen del vicio o por último, que se ven arrastrados por los atractivos de la perdición, se entregan por completo en brazos de la desgracia. Calixto Buitrón, fue joven, alegre e inteligente, mas ahora, no es ya ni joven ni alegre y sí bastante idiota. Pasad al Hospital Civil y lo encontraréis en una triste celda.

¿No pagas?, pues toma
Francisco Bueno había libado varios vasos de tequila, dizque para comer con apetito, cuando se presentó Apolinar Méndez, pidiéndole una copa. Bueno, que no es muy caritativo se negó a obsequiar la petición de Méndez, quien sin más preámbulos, sacó un enorme cuchillo que traía debajo de una camisa hecha jirones y diciendo a Francisco: “¿No pagas?”, pues toma… y hundió el cuchillo en la región costal izquierda.
Méndez está puesto a buen recaudo por la policía.

[Fuentes consultadas: El Estandarte, Periódico Oficial del Estado, El Correo de San Luis, años 1905, 1907 y 1909].

También te puede interesar

Notas más leídas en la última semana

Redes Sociales

Suscríbete y recibe nuestras más recientes notas

Regístrate y recibe las más recientes notas

País Mundo

¿Quieres estar al tanto de todo lo que está sucediendo en nuestro mundo? ¡Síguenos en nuestro nuevo perfil en Facebook! Conéctate con otros seguidores, comparte tus pensamientos y participa en interesantes debates. No te pierdas la oportunidad de estar al tanto de todas las noticias
¡Haz clic en el botón ‘Seguir’ ahora!