Diversos medios de comunicación a nivel nacional informaron que el candidato de Morena a la presidencia municipal de Huetamo, Michoacán, Rogelio ‘El Canario’ Jaramillo, se encuentra en la lista de los delincuentes más buscados de la Agencia de Control de Drogas de Estados Unidos (DEA).

La información estaba disponible desde hace varios días, periódicos y portales de noticias dieron a conocer que el aspirante a gobernar la localidad ubicada en Tierra Caliente –una de las regiones del país más afectadas por el narcotráfico y la violencia- ha sido señalado por presuntos vínculos con grupos criminales.

Junto con Portillo Jaramillo –hijo del músico Edilberto Portillo- aparecen otros dos familiares suyos: su tío Marcelino Portillo y su primo Francisco ‘Chico’ Jaramillo, quienes han sido acusados de operar una de las principales células del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en la zona limítrofe entre Michoacán y Guerrero.

Otro de sus tíos, Gregorio Portillo Mendoza, alcalde de Zirándaro, Guerrero, fue víctima de un secuestro exprés el pasado 18 de marzo, cuando fue ‘levantado’ por un comando armado, siendo liberado horas más tarde. En el pasado, se ha ofrecido como mediador entre los principales cárteles para buscar un acuerdo de paz en la región.

Sin embargo, no es el único aspirante a la alcaldía de Huetamo que tiene nexos con la delincuencia organizada, pues la candidata del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Dalia Santana Pineda, fue vista reuniéndose con el capo Servando ‘La Tuta’ Gómez, líder de la Familia Michoacana, en 2014, cuando era la edil de la localidad.

Pese a la evidencia gráfica, Santana no fue detenida por su relación con el narcotraficante, sino por los delitos de extorsión y homicidio, por los cuales estuvo encerrada durante tres años y medio, cuando se le concedió un amparo para salir en libertad; sin embargo, ningún medio nacional ha hecho eco de esta información.