- Gobernador reconoce que no se ha podido contener la ola de violencia.
El robo cometido ayer por la tarde a un local comercial de la Plaza de la Mujer en el Centro Histórico y a unos pasos de Palacio de Gobierno, vulneró todos los esquemas de seguridad pública.
Unas horas antes, por la mañana, el Gobernador Juan Manuel Carreras Lopez, aceptó que la autoridad se había visto rebasada ante la delincuencia organizada y más tarde se lo confirmaron a escasos 200 metros de su despacho.
Luego de que manera violenta un grupo de delincuentes arribaran la tarde de ayer a una joyería para romper varia cristalería y llevarse un botín hasta el momento sin cuantificar, la prevención en el centro de la ciudad evidentemente es fallida.
A plena luz del día, con varios clientes en su interior y empleados; se vivieron momentos de pánico y ni un solo policía se atrevió a desafiar a los maleantes a pesar de que diariamente se les ve paseándose, sonriendo y checando las redes sociales en su celular.
Lo que es un hecho es que ni el Gobernador está seguro y es que a metros de distancia de donde despacha hubo una situación que generara que nuevamente se encendieran los focos rojos.
Peor aún el mandatario Carreras Lopez asegura que se va perdiendo la batalla contra la ola criminal y que no se ve por donde se les pueda hacer frente, lo cual es una señal preocupante y que demuestra que ni una sola platica en este rubro se está aplicando correctamente.
