Esta madrugada, una tormenta eléctrica sorprendió a los potosinos dejando a su paso calles completamente anegadas, conductores varados y cierres en las principales arterias de la ciudad y su zona metropolitana.
Ya para cerrar la semana, los ciudadanos descansaban plácidamente (aunque otros seguían en la fiesta) cuando de pronto los rayos y truenos los despertaron y ya no los dejaron dormir.
La lluvia comenzó a arreciar y bastaron unos minutos para que el Río Santiago, Río Españita, Acceso Norte y Puente Pemex fueran cerrados a la circulación.
Mientras tanto las calles como Manuel José Othón, Paso a desnivel de Plaza San Luis, Universidad, Himno Nacional, Carranza entre muchas otras incluyendo las colonias sobre todo las que se sitúan en el oriente, presentaron encharcamientos e inundaciones.
Situación que siempre se presenta a causa del deficiente sistema de drenaje con el que cuenta la ciudad y la falta de su mantenimiento precisamente por la basura que arroja la gente cochinona.
Hoy miles de potosinos se dirigieron a sus centros laborales desvelados por no poder dormir, hubo amas de casa que seguramente ni lonche echaron, la causante fue la tormenta.
Mención aparte el severo congestionamiento vehicular que se vive por los cierres a la circulación y que también tienen que ver con la incapacidad de las autoridades para diseñar un efectivo plan operativo ante este tipo de contingencias.
Hay oficiales de tránsito que hacen efectiva la frase “el lunes ni las gallinas ponen”’y optan por checar su celular en los cruceros como siempre ocurre en Industrias y Periférico donde el caos vial es impresionante.