La mujer baleada por la mañana en la colonia Molinos no logró sobrevivir a la herida de bala que le propinó en la cabeza su aparente pareja sentimental, un ex policía estatal, y el delito podría tipificarse ahora como feminicidio. Esto último aunque el homicida se encuentra herido de un disparo que al parecer él mismo se propinó también en la cabeza.
De acuerdo a las primeras investigaciones basadas en testigos presenciales y en informes policiacos, el agresor tenía una relación personal con la mujer, y antes de dispararle se les escuchó discutir a gritos, después sólo se escucharon tres detonaciones; aunque las heridas reportadas en los protagonistas hablan solo de dos heridas de bala.
Las investigaciones tendrán que dilucidar el móvil del asesinato contra la mujer, y si es verdad que sostenían relaciones íntimas; asimismo verificar que el hombre se disparó él mismo después de agredir a su compañera, pero por el momento eso es lo que arrojan las investigaciones.
Por otro lado el victimario se encuentra muy delicado de salud y no se sabe si sobreviva, pero en caso de que así sea al homicidio que cometió se le podría sumar el agravante de feminicidio, pues una de las cuasales para determinar tal tipo de delito señala que el autor del crimen debe haber tenido alguna relación de “afecto” con la víctima.
Por su parte, la Policía Ministerial del Estado envío un comunicado de prensa informando del fallecimiento de la mujer, y apuntando que “testigos señalaron que vieron que una persona conocida de la hoy occisa, entró al domicilio, y tras una discusión, presuntamente el hombre sacó el arma de fuego y le disparó en la extremidad cefálica, para luego él darse un tiro en la cabeza”.