+HALLAN RASTROS DE SANGRE Y 21 CASQUILLOS DE R-15
+EL EJECUTADO ERA BODEGUERO DEL MERCADO DE ABASTOS
Fue un comando de al menos diez hombres con armas largas el que este domingo 20 de noviembre efectuó el secuestro de tres hombre en el Bar Jalapeños, ejecutando luego a uno de ellos. Entre los dos que continúan desaparecidos está al parecer el dueño del citado negocio.
Sobre la persona ejecutada se confirmó que se trató de un bodeguero del mercado de Abastos, de nombre Ulises García Aguillón, quien fue localizado la noche del domingo 20 de noviembre en el Río Santiago, con tres disparos en su cuerpo. Esto luego de ser torturado, según se pudo apreciar en el cuerpo de la víctima.
Por otro lado, cerca del bar de Avenida Industrias y la calle Madroños, donde se dio el plagio de los tres hombres, se hallaron rastros de sangre y 21 casquillos percutidos de rifle R-15. Esto en la esquina que forman Industrias y Francisco Martínez de la Vega, a cuatro cuadras del bar.
El tipo de rastros que se pueden apreciar en el lugar parecieran ser de alguien que se daba a la fuga, por lo cual no se descarta que dicha sangre haya correspondido a García Aguillón, en un presumible fallido intento de escapar de sus secuestradores, quienes al final habrían terminado rematándolo en el Río Santiago.
Sin embargo eso último no está confirmado, aunque sí se dio a conocer que los casquillos encontrados en Industrias y Martínez de la Vega son del mismo calibre que las balas que acabaron con el comerciante de Abastos.
Trascendió que el día de los hechos los tres hombres anduvieron de festejo, y antes de las 10 de la noche el grupo de amigos llegó a terminar su celebración al Bar Jalapeños, ubicado en la citada avenida Industrias dentro de una plaza comercial de reciente creación.
El grupo de amigos tenía poco tiempo de haber llegado al bar de la plaza El Quijote cuando de manera intempestiva, alrededor de las diez y media de la noche, arribó en gran operativo para policiaco el comando armado, sembrando el miedo entre la concurrencia que se encontraba en el lugar.
Varios clientes entraron en zozobra, debido a que no sabían lo que estaba ocurriendo, temiendo obviamente por su integridad física. Sin embargo, el grupo armado iba con el objetivo específico de secuestrar a los tres hombres ya señalados.
Pocas horas después fue cuando apareció el cuerpo de Ulises García en el Río Santiago, a la altura del puente Carlo Magno. Se presume que lo bajaron de una de las unidades, y le dieron un balazo en la cintura, otro en el tórax, y el “tiro de gracia” en la cabeza.
Al momento de escribir esto no se tienen datos del posible paradero de los otros dos hombres.
